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2021-11-08 02:03:25
La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático de 2021 se llevará a cabo hasta el 12 de noviembre.
Desde el 31 de octubre y hasta el 12 de noviembre en la ciudad de Glasgow, Escocia se lleva a cabo La Conferencia de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático de 2021. Se trata de la 26° conferencia de las partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, y hasta el momento “se presentaba como reunión más relevante de los últimos 10 años”.
Es por ello que, en el último programa de Córdoba Primero Radio, José Ortega profundizó sobre aspectos más importantes de la conferencia que reúne a 200 delegaciones, 120 mandatarios y sobre los que están puestos los ojos de todo el mundo.
Antes de desarrollar su columna sobre política internacional, explicó cuál es el origen de la COP26 y en qué consiste esta cumbre: “En 1994 se firmó la Convención de Naciones Unidas sobre cambio climático, un tratado madre, del que surgen entre otros, el Protocolo de Kioto (1998), y el Acuerdo de París (2015). Son acuerdos específicos en el marco de este gran tratado, cuya máxima autoridad es la cumbre de parte. Es una política pública internacional que va a cumplir 30 años”.
En conversación con Jorge Navarro, comentó: “La magnitud de los efectos del dióxido de carbono en el ambiente a nivel mundial va mucho más allá de una reunión, hay una necesidad real de adoptar estrategias para que deje acumularse en la atmosfera y generar el efecto invernadero”.
Aclaró que los resultados dependen de algunas líneas políticas: “Los expertos señalan dos grandes pujas: una política y otra económica que impactan en distintos planos, lo que implica la rediscusión del modelo capitalista y una profunda modificación en las actuales matrices de acumulación”.
“A nivel político, occidente, con el ingreso de manera activa de los Estados Unidos, busca una manera de imponer una estrategia que a mediano plazo tenga impacto sobre la estrategia de acumulación de China, Rusia y China”, agregó.
Otro plano de discusión, se da entre la periferia y el centro, en la que los estados en desarrollo reclaman la asunción de responsabilidades sobre el deterioro global. En este contexto exigen un resarcimiento económico con el propósito de reconvertir la economía y adaptarlas al cambio climático, “desde el año 2009 se habla de una asistencia financiera de U$S 100 mil millones anuales, y es aún materia de análisis”, destacó Ortega.
Nuestro columnista indicó que en la cumbre se habla de una idea cierta de trabajar en un convenio para trabajar sobre la deforestación que azota al planeta. Esta iniciativa, propuesta por Joe Biden, por lo pronto cuenta con una adhesión comprometida de más de 100 países.
Además, remarcó que uno de los temas que promete un rápido avance, es la reducción de las emisiones de metano, por un lado, debido a su alto nivel contaminante en relación al dióxido de carbono, y por otro, teniendo en cuenta que es la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen quien motoriza este proyecto.
El analista de política internacional especificó, también cuáles fueron las principales líneas en las que se centró la participación argentina, en COP 26 que a su vez ha sido muy bien recibida: “En primer lugar, se basa en el planteo de la deuda vinculada con la sostenibilidad ambiental, por otro lado, específicamente con lo que tiene que ver con la inversión verde, un proyecto de gran respaldo técnico; y por último llegar a conformar compromisos reales de financiación y enfatizar sobre el concepto de solidaridad ambiental”.
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