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2020-09-20 20:53:25
La obra de gobierno de Bustos es muy interesante desde el hecho mismo de la constitución, y desde la extinción del Cabildo asociado a una institución colonial.
En Córdoba Primero, Rodrigo Ferrero, historiador de la Universidad Nacional de Córdoba, repasó la historia biográfica, política y militar del primer gobernador elegido por los cordobeses.
A dos siglos de su asunción en el gobierno de Córdoba, Juan Bautista Bustos, es emparentado con la lucha por la independencia, caracterizado por su rebeldía y sus ideas progresistas.
Ese lugar en la sombra que ocupó Bustos obedece a una construcción historiográfica que se fue reproduciendo, y que afortunadamente fue perdiendo vigencia.
Como muchos otros hombres del interior, no se dedicaba a una carrera de armas, sino que era un comerciante dedicado a la venta y cría de mulas, y esa actividad lo lleva a trasladarse a Buenos Aires en 1805 y permanecer hasta 1817.
Pasa de ser un comerciante a involucrarse en las invasiones inglesas a la Ciudad de Buenos Aires, por su desempeño es nombrado por Liniers, como Capitán del cuerpo de Arribeños, un ejercito compuesto por provincianos como Martin Miguel de Güemes.
En calidad de capitán va presenciar el Cabildo Abierto del 22 de mayo de 1810 y votará a favor de la revolución.
Ya dedicado de lleno a la carrera de armas, primero va a ser coronel y luego general del Ejército del Norte, a cargo del General Manuel Belgrano.
Se fue consolidando su presencia militar, fundamentalmente cuando se encarga de la vigilancia interna del orden revolucionario, frente a la proclamación de una alternativa al orden central de Buenos Aires.
Cuando es llamado a intervenir a principios de 1820 a los líderes federales en Arequito, a favor de Buenos Aires, se sublevan junto al “Manco" Paz, debido a que consideraba que no se debería derramar sangre entre hermanos, y que el esfuerzo de guerra debía estar concentrado en la independencia. Esto introduce a Bustos al escenario de la autonomía de las provincias unidas y habilita a que las fuerzas de Entre Ríos y Santa Fé derroten a Buenos Aires, en la batalla de Cañada de Cepeda, con la que se finaliza al estado central del Directorio.
Luego del motín de Arequito, vuelve a Córdoba, donde se relaciona con los sectores populares y donde las elites reconocen en Bustos como el hombre capaz de orientar a la provincia a un orden estable.
Aquí es cuando se empieza a modelar este particular federalismo de Bustos. Se va a destacar por ser un federal ilustrado, ya que tiene un fuerte interés por dotar la organización autónoma de la provincia y su constitución.
Si bien quienes votaron por Bustos fueron los vecinos distinguidos, contaba con un gran apoyo popular.
La obra de gobierno de Bustos es muy interesante desde el hecho mismo de la constitución, y desde la extinción del Cabildo asociado a una institución colonial.
“Se ha operado una revalorización de la figura de Bustos, el General Paz ha ocupado un lugar primordial por su carácter de estratega militar de líder de la Liga Unitaria, y en representación de la idea alejada de la ideal autonomistas y emparentada con el centralismo”, subrayó.
El historiador analizó: “Esa construcción privilegiada del General Paz, obedece a la sintonía entre la visión historiográfica liberal clásica y las desvalorizaciones de los referentes históricos que no fueron una alternativa al orden construido por Buenos Aires, y en ese escenario el General Bustos es el claro ejemplo de un proyecto alternativo al de Buenos Aires”.
Finalmente considerando a la idea de federal de Bustos como ideal en la construcción de un nuevo orden de país dijo: “El federalismo de Bustos es el que se trató de construir en la Carta Magna de 1853, porque impulsa de manera autónoma el desarrollo de las instituciones de la provincia, sin dejar de pensar en una organización nacional en el que se complementan todas las partes”.
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